Sabor, salud y cariño: Así es la alimentación moderna de nuestras mascotas

Alimentación de mascotas: Entre tendencias, ciencia y amor

La importancia vital de una buena dieta

Al pensar en el bienestar de perros y gatos, muchos tutores se concentran en el ejercicio, las visitas al veterinario o el tiempo de juego. Pero la alimentación, a menudo, determina directamente la calidad y la longevidad de su vida. Un chihuahua que recibe un alimento balanceado específico puede disfrutar de años saludables y alegres, mientras que un gato siamés con dieta inadecuada podría enfrentar problemas renales antes de lo esperado.

¿Comida comercial o dieta casera?

Este debate divide incluso a los expertos. Las dietas comerciales, especialmente las fórmulas premium, buscan adaptarse a nutrición mascotas basada en años de investigación científica. Por otro lado, la comida casera –cuando está supervisada por veterinarios nutricionistas– puede personalizarse teniendo en cuenta alergias, enfermedades o preferencias individuales.

Ana, cuidadora de tres caniches, prepara carne cocida y verduras para sus perros bajo control veterinario. «Desde que cambié su alimentación, están más activos y su pelaje brilla», cuenta orgullosa. Pero advierte: «Nunca improviso ni copio recetas de internet sin consultar al especialista».

Riesgos de la improvisación

Ofrecer una dieta casera sin supervisión multiplica las probabilidades de carencias graves, sobre todo de minerales y vitaminas esenciales. Los perros pueden necesitar suplementos de calcio; los gatos, por su parte, requieren taurina, presente en ingredientes cárnicos y fundamental para evitar dolencias cardíacas y problemas de visión.

Etapas de la vida y necesidades cambiantes

Cada fase vital necesita un enfoque específico. Los cachorros y gatitos requieren una mayor cantidad de proteínas y grasas para sostener su rápido crecimiento. Muchas marcas ofrecen líneas «junior» con nutrientes reforzados en EPA y DHA, ácidos grasos valiosos para el desarrollo cerebral y visual.

Un bulldog inglés adulto, por ejemplo, puede beneficiarse de alimentos con antioxidantes adicionales para preservar sus articulaciones. Mientras tanto, un perro senior como el pastor alemán precisa fórmulas reducidas en calorías y más fibra para cuidar la figura y el tránsito intestinal.

¿Existen alimentos prohibidos para perros y gatos?

La lista de lo que no deben ingerir puede sorprender incluso a quienes conviven con animales desde hace años. El chocolate es un clásico que todo mundo reconoce como tóxico para los perros, pero hay otros alimentos cotidianos igual de peligrosos. Las uvas, la cebolla, el ajo o el xilitol (edulcorante presente en muchos productos light) pueden causar desde insuficiencia renal grave hasta convulsiones.

En gatos resulta especialmente grave el consumo de paracetamol, un medicamento inocuo para humanos pero letal para felinos. Bastan dosis mínimas para provocar fallas hepáticas irreversibles.

La moda de la dieta BARF: ¿Una revolución o un riesgo?

En los últimos años, muchas personas apuestan por la dieta barf (acrónimo de “Bones and Raw Food” o “Biologically Appropriate Raw Food”), basada en ofrecer carne, huesos carnosos, frutas y verduras crudas. Sus defensores afirman que respeta la naturaleza de perros y gatos, y reportan mejoras en pelaje y vitalidad. Pero los colegios veterinarios advierten: preparar estos menús en casa puede facilitar la aparición de bacterias peligrosas como Salmonella o E. Coli, además de desequilibrios nutricionales si no se formulan a la medida de cada animal.

Ana López, veterinaria madrileña, señala: “Veo perros felices y saludables con BARF, pero también casos de fracturas dentales por huesos o fallos hepáticos por exceso de vísceras. Si se elige este camino, debe hacerse bajo control profesional estricto”.

Snacks y premios: del capricho al refuerzo positivo

Quien ha entrenado alguna vez un border collie sabe que los premios alimenticios pueden acelerar el aprendizaje y fortalecer el vínculo humano-animal. Sin embargo, conviene recordar que el abuso de golosinas industriales puede causar sobrepeso, especialmente en razas propensas como el labrador retriever o el carlino.

Para refrescar ideas, algunos tutores optan por snacks naturales, como trocitos de manzana (sin semillas) o pequeños dados de pechuga de pollo cocido. Eso sí, siempre en cantidades moderadas y nunca sustituyendo la ración de pienso o comida principal.

Alimentos funcionales: ciencia al plato

En el mercado actual abundan productos diseñados para atender necesidades específicas: hay piensos anti-estrés, opciones hipoalergénicas o fórmulas ricas en EPA/DHA para animales con problemas articulares. Además, ingredientes como la glucosamina, condroitina o probióticos se han vuelto habituales en los envases, sobre todo para perros de razas grandes (gran danés, rottweiler) o gatos de edad avanzada.

Por otro lado, las líneas «grain free» (sin cereales) han ganado adeptos entre quienes buscan minimizar alergias, aunque no hay estudios concluyentes que indiquen que todos los perros o gatos deban evitarlos, salvo los casos diagnosticados de intolerancia.

Control de peso: mucho más que una balanza

La obesidad animal es uno de los principales problemas de salud en países como España o México. Se estima que más del 40% de los perros urbanos presentan sobrepeso. Los factores son múltiples: falta de ejercicio, exceso de premios y raciones sobredimensionadas.

El caso de Lolo, un beagle madrileño al que sus dueños consentían con trozos de pan y embutido, es paradigmático. Tras desarrollar artritis y varios sustos digestivos, el veterinario pautó un plan alimenticio ajustado, logrando que en menos de un año Lolo recuperara su agilidad y ganas de jugar.

Herramientas como la «tabla de condición corporal» o el cálculo de calorías recomendado por los fabricantes de alimento permiten individualizar la cantidad ofertada, siempre con apoyo veterinario.

Cómo identificar una buena nutrición a simple vista

Una mascota bien alimentada se refleja en su alegría, brillo en el pelaje, ausencia de lesiones cutáneas y heces consistentes. La caída excesiva de pelo, el letargo o los cambios de peso bruscos suelen alertar sobre desequilibrios alimenticios. A menudo, razas como el husky siberiano suelen mostrar el efecto de una dieta pobre en aceites esenciales con cambios notables en su pelaje denso y lustroso.

En gatos persas, propensos a las bolas de pelo y trastornos digestivos, existen opciones de comida adaptada que incorporan fibras especiales para facilitar la eliminación de pelo ingerido durante el acicalamiento.

¿Es la alimentación una cuestión de rutina o de amor?

Detrás de cada elección nutricional subyace una decisión crucial: ¿estamos dando lo mejor a nuestras mascotas? Lo cierto es que los hábitos cambian y la ciencia avanza, pero el objetivo permanece intacto: lograr que perros, gatos y otros compañeros de vida gocen de salud y felicidad mucho más allá de la mera supervivencia.

Así, cada cuenco, cada menú y cada premio es un pequeño acto de amor que construye, día a día, el bienestar de ellas y de quienes compartimos sus travesuras y silencios cotidianos.